Gabachos go Home!! (HISTORIAS DESDE LA BARRA DE UN BAR)

Desde este escaparates nos sorprende ver como de repetitiva puede resultar la historia, más cuando se trata de la Historia de España, pues si algo debemos tener claro es que aquí quien viene es para quedarse, o al menos lo intenta, tal como sucedió en el caso que nos toca con los franceses que se llevaron cuatro años copando las playas...

Corría el año 1808, mes arriba, mes abajo, cuando el emperador tamaño llavero conocido por Napoléón decidió cruzar los Pirineos en principio con intención de ir a Gibraltar a, según se había enterado, a comprar tabaco y chocolate más barato. Sin embargo, al ver que el clima hispano, era mucho más agradable, decidió quedarse junto a sus tropas, mientras hacía un cambio: mandaba a Francia a la familia real española, con Carlos IV a la cabeza junto al tontolaba de su hijo Fernando VII, aquel por el que se pelearon los españoles pero al se la trajo al flojo, mientras en su lugar ponía a su hermano Joselito, más conocido por todo por Pepe Botella, y eso que el hombre era abstemio.

Se ve que ni el cambio de monarcas, aquí somos mucho de malo conocido que bueno por conocer, ni que las tropas gabachas coparan los chiringuitos de playa, y además se fueran sin pagar, decidimos armarnos hasta los dientes y echarlos. Eso si, puestos a originalidad, inventamos una nueva forma de guerrear: la guerra de guerrilla, que consiste en ser más pesado que una mosca cojonera y fastidiar en los momentos más inoportunos.