Quizás a muchos le parezca una desfachatez que alguien dedicado a la literatura se meta en lides de reivindicaciones sociales, es posible que por esta clase de artículos me haga perder lectores, pero me trae sin cuidado, ante todo honestidad, y es que la actualidad manda, aunque lo que manda huevo son las imagenes tan denigrantes aparecidas en la marcha del 25-S "Rodea al Congreso".
Cuando me refiero a las imagenes aparecidas me refiero a las que los manifestante han subido a las redes sociales, porque los medios se encargarán de maquillarlas o ocultarlas para decir que solo había cuatro gatos antisistema. Lo visto clama al cielo, policias pegando hostias sin razón (cada día demuestran menos cerebros, no se dan cuenta que a ellos también le están recortando, pero como sus sueldos son bueno lo notan menos). Golpes que dejarán a una persona en silla de ruedas, golpes que coaccionan la libertad, que recuerda mucho a tiempos preteritos, a cuando protestar estaba prohibido y solo había que asumir sin cuestionar (tal como hacen los policias).
Antistema, pues si, a mucha honra, a boca llena, porque el sistema actual es una mierda, basada en oprimir a quien produce, en servir a basuras de corbata que solo nos consideran cifras y son más dignos de ser llamados Vendedores de Humos. Dejaros de hablar de chuminadas para desviar la atención, solo soy escorias, todos, izquierdas y derechas, sois el mismo perro con el mismo collar.
Cospedal oye esto, lo de hoy no se asimilaba al 23-F de Golpe de Estados solo entendéis los políticos y demás elites clasistas, lo que el pueblo hace es Revolución. Piensa que la próxima vez en vez de ser rodea el Congreso, el lema puede ser quemarlo.
Ahora censurarme y demostrar de esa manera de que pasta estáis hechos, pensad que esto seguirá siendo el altavoz de los oprimidos porque ahora más que nunca, seguimos en la yesca...
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